El responsable de que se cumpla la ley es el dueño del local, por lo que lo primero que hay que hacer es hablar con el responsable para que requiera al fumador infractor.
Si este no actúa, se puede rellenar una hoja de reclamaciones -y llevarla luego al registro- y poner una denuncia en la Consejería correspondiente (la de Consumo, que suele estar integrada en Sanidad o Salud).
También se puede denunciar a la Policía Municipal que siempre estará obligada a cursar la denuncia.
En la web
http://www.nofumadores.org/ recogen denuncias y las tramitan.
Fumar donde está prohibido se considera una falta leve. Si se hace de forma aislada, la multa será de hasta 30 euros. Si la conducta se repite tres veces, pasará a ser una falta grave, y la multa estará entre los 601 y los 100.000 euros.
El dueño del bar que deja que se fume incurre en una falta grave. La multa va de 601 a 100.000 euros.